Qué es el CPM y cómo calcularlo

CPM
El CPM o costo por mil es uno de los métodos más utilizados en marketing digital para calcular el coste de un anuncio. Te contamos qué es y cómo calcularlo.

El famoso costo por mil, comúnmente conocido por sus siglas CPM, es sin lugar a duda uno de los métodos más usados en marketing digital para calcular el coste de un anuncio para páginas web. Así mismo, es un indicador que se usa generalmente en contenidos publicitarios en los que se prevé que tendrán un gran alcance y, por tanto, miles de impresiones.

 

¿Cuánto cuesta un CPM?

El CPM permite medir el costo de cada mil impresiones de los anuncios publicados en sitios web. Esto significa que si un anunciante determina que el CPM de cierto anuncio cuesta $4, entonces deberá pagar $4 por cada 1.000 impresiones.

En otras palabras, el costo dependerá de cuánto esté dispuesto a invertir un anunciante en el contenido publicitario. Esto a su vez depende de diferentes tipos de factores que se pueden aprovechar para garantizar mayor número de impresiones, como el tráfico de usuarios de los sitios web donde se encontrarán los anuncios.

 

Impresiones

Llegados a este punto, nace una pregunta tan importante como inevitable: ¿Qué es una impresión? Y lo cierto es que las impresiones, ad views o vistas de anuncios, no son más que el número de veces que un usuario está expuesto a un anuncio publicitario.

Así mismo, es importante resaltar que estos se miden cuando un usuario carga una página web desde el navegador de algún dispositivo, por determinado período de tiempo, sin que sea necesario interactuar con el anuncio. Es decir, que los clicks nada tienen que ver a la hora de medir las impresiones.

Son entonces las impresiones las que permiten determinar la visibilidad y el alcance del contenido publicitario.

 

Más impresiones no significan más visibilidad

En la actualidad, las campañas de marketing digital están cada vez más enfocadas en crear una fuerte “identidad de marca” a través de anuncios que causen impacto para generar más visibilidad y a su vez un compromiso con los usuarios. De hecho, en los últimos años se ha logrado determinar que sólo el 49% de los anuncios en páginas web son realmente vistos por los usuarios.

De esta forma, podría decirse que, aunque la publicidad sea “visible”, no quiere decir que realmente tenga mucha visibilidad. Y, por supuesto, es precisamente en este punto donde entran en juego las estrategias para hacer que las impresiones sean realmente visibles.

 

Cómo lograr que las impresiones tengan más visibilidad

Afortunadamente, en los últimos años se han logrado definir diferentes factores que incrementan la visibilidad de las impresiones, entre ellos el porcentaje de píxeles por segundo, por lo que un anuncio debe aparecer por más de un segundo en pantalla. Para videos en cambio, se recomienda que aparezcan por más de dos segundos en pantalla.

Como es de imaginar, el tamaño del anuncio juega un papel sumamente importante, por lo que una de las recomendaciones más recurrentes es adaptar las creatividades a los distintos dispositivos por los que se pueden acceder a los sitios web. En pocas palabras, ordenadores, tablets y teléfonos móviles no pueden regirse de la misma forma.

Saber tomar ventaja de los factores que incrementan la visibilidad de los anuncios publicitarios es clave para garantizar que una publicidad alcance el público objetivo y optimizar las inversiones.

 

Cómo calcular el CPM

Finalmente, llega el momento de calcular el CPM de una campaña publicitaria y la fórmula para hacerlo es verdaderamente sencilla.

Para calcular el coste por mil se divide el coste total de la publicidad entre el número total de impresiones que genera el anuncio, para luego multiplicar este número por mil. De esta forma y con la ayuda de los ejecutivos de cuentas y profesionales de marketing digital se puede medir el costo de una campaña publicitaria para ajustar el CPM más adecuado para su inventario.

Además, el CPM también se puede definir de acuerdo al tipo de tráfico que tenga el sitio web.

Sucede muy a menudo que un mismo sitio web tiene tráfico que proviene de diferentes países o regiones, y lo cierto es que en cada una de esas zonas geográficas el CPM tiene un valor diferente que está directamente relacionado al poder adquisitivo de la población.

¿Por qué se mide así? Porque el presupuesto que esté dispuesto a invertir un anunciante depende de la capacidad de compra de su público. Esto afecta entonces directamente al precio del CPM, y consecuentemente a las ganancias que obtiene el publisher. Es imprescindible contar con un partner que pueda optimizar al máximo el valor del CPM para obtener el mejor beneficio posible del inventario disponible.